
3 razones para ver el C-Drama de fantasía romántica "Lost You Forever 2"
El drama chino de fantasía histórica “Lost You Forever” se convirtió en uno de los mayores éxitos de 2023. Los populares personajes regresan en su segunda entrega, con dinámicas cambiantes y enfrentándose a retos insuperables. Una adaptación de la serie de novelas de Tong Hua “El libro de la montaña y el mar”, la serie nos traslada a una época en la que humanos, deidades y demonios coexistían bajo el dominio de tres reinos: Xiyan, Chenrong y Haoling.
Muchas cosas han cambiado desde la primera temporada: Cang Xuan (Zhang Wan Yi), nieto del rey de Xiyan, ha ascendido al trono. Xiao Yao (Yang Zi), la hija del rey de Haoling y su amiga y prima de la infancia, sigue un camino diferente a pesar de que se han reunido. Y Ye Shi Qi/Tushan Jing (Deng Wei) sigue suspirando por Xiao Yao y está dispuesto a poner su vida en juego.
El drama vuelve a cautivar a los espectadores con sus relaciones entrelazadas y el tira y afloja entre los protagonistas. Aquí te traemos tres razones para no perderse “Lost You Forever 2”.
Una protagonista desinteresada y práctica
Xiao Yao es una mujer práctica. Su altruismo y su deseo de ayudar a los demás a expensas de su propio bienestar y sus sentimientos pueden hacerla parecer pusilánime, pero está lejos de serlo. Como princesa de Haoling, se siente eufórica cuando Cang Xuan asciende al trono, y aunque ambos habían prometido apoyarse mutuamente, sabe que eso no es posible. Con el tiempo, vuelve a ejercer la medicina y a servir a la gente independientemente de su estatus social y su casta. Pero en el fondo, es una mujer conflictiva sobre la que pesa la carga de los sacrificios hechos y por hacer. Aunque es evidente que se siente mal cuando Cang Xuan toma una nueva reina, también hay un abismo en su corazón que sigue sin cicatrizar a pesar de su noviazgo con Chishui Feng Long (Wang Hong Yi). Los otros dos hombres que sienten afecto por ella son Tushan Jing (Deng Wei), ya casado, y Xiang Liu (Tan Jian Ci), su supuesto enemigo.
Xiao Yao ha perdido la chispa que tenía y es una sombra de lo que fue. “Ha perdido las ganas de vivir”, dice su padre. Su objetivo en el pasado era ver a Cang Xuan ascender al trono y volver a casa, pero parece que ya no tiene ambición ni voluntad. ¿Seguirá siendo tan cautelosa con las relaciones como lo fue en el pasado o, por una vez, se dejará llevar? El arco argumental de Xiao Yao es mucho más complejo que el de la primera temporada. Aunque hay momentos en los que puedes perder la paciencia con su personaje y las decisiones que toma, te das cuenta de que ella también es víctima de sus circunstancias.
Yang Zi está perfecta en su interpretación y saca a relucir todos los matices de la ahora reticente Xiao Yao. Capta bien los tiempos cuando vemos que Xiao Yao pasa de ser la alegre Wen Xiao Liu a la vigilante pero sumisa Xiao Yao, lo que está muy bien logrado.
Inquietud en la cabeza de quien lleva la corona
“Cuanto más poder tengo, menos opciones puedo tomar”, dice apesadumbrado Cang Xuan. Ha ascendido al trono de Xiyan, pero Cang Xuan se siente impotente e indefenso, tanto que ni siquiera puede elegir casarse con quien quiera. Para salvaguardar Xiyan y sus intereses, se ve obligado a tomar como reina a la princesa de Chenrong Xin Yue (Wang Zhen). Segundos antes de confirmar oficialmente su matrimonio, le vemos dudar mientras piensa para sí: “Me caso con una mujer que ni me ha apoyado, ni ha compartido buenos ni malos momentos”. Su corazón late por Xiao Yao, y cuando lo confiesa en estado de embriaguez, es reprendido por su abuelo.
Aunque aplaca a los ancianos reales con su plan de trasladar la capital y se los gana con su diplomacia y su pericia culinaria, Cang Xuan es un hombre solitario. Su vida ha estado plagada de pruebas y pérdidas de seres queridos, y es evidente que estaría encantado de renunciar a la corona y volver a ser el fabricante de vino. Se lo dice a Xiao Yao mientras recuerda una época en la que no tenía nada a su nombre, pero tenía a Xiao Yao, que era más que suficiente.
Cang Xuan también es un hombre agobiado. Aparte de unificar el reino y conservar su poder, parece que no podrá sentirse realizado en su vida. Conserva un sofisticado encanto y calma, pero puede ser igualmente despiadado hasta el punto de no tener piedad cuando se enfrenta a sus adversarios. Cang Xuan también es un hombre empático y sensible con sus seres queridos. Así mismo, anhela el amor de la mujer que no puede ser suya. ¿Podrá superar los numerosos obstáculos que se interponen en su camino, o se verá agobiado por el peso de la corona que lleva en la cabeza?
Zhang Wan Yi articula con facilidad la impotencia y frustración de Cang Xuan. Hay un arco constante en su personaje, que ha evolucionado a lo largo de la primera temporada. El amor que siente por Xiao Yao y el hecho de estar dividido entre sus deberes como Rey te harán sentir lástima por él.
Una montaña rusa emocional con imágenes impresionantes
Tushan Jing vive su vida con remordimientos. Confiesa que su corazón no es lo bastante grande y que sólo tiene sitio para Xiao Yao, que sigue desconfiando de él. Tushan Jing se pone en la línea de fuego para recuperar sus recuerdos perdidos, ya que está convencido de que no ha engendrado a su hijo y quiere llegar hasta el fondo de las conspiraciones contra él. También está Fang Feng Bei, que ama a Xiao Yao y siempre está dispuesto a ayudarla, pero es lógico y consciente de que no puede estar con ella, por mucho que lo desee. Entre el romántico y entrañable Tushan Jing y el cínico pero leal Fang Feng Bei, también está el ingenuo pero débil prometido de Xiao Yao, Chishui Feng Long.
Tan Jian Ci interpreta de forma impactante a un hombre complejo con emociones en constante cambio. La dualidad de sus personajes, Fang Feng Bei y Xiang Liu, es interpretada con delicadeza por el actor, que se gana el corazón con su retrato de un hombre tan intrépido como vulnerable.
Dang Wei, que impresionó como el entrañable Shi Qi, da vida a su personaje Tushan Jing. Tushan Jing, que está indefenso y lucha por fortalecerse, es víctima de varios factores ajenos a su voluntad. Dang Wei no defrauda y brilla en su presentación.
Mientras Xiao Yao se ve atrapada entre estos tres pretendientes y la devoción de Cang Xuan, el drama contiene muchas cosas aparte del romance y la agitación política que late en su interior. Hay intriga y amor, además de magia y traición, que se despliegan en medio de esta espectacular producción. El ornamentado vestuario, la gran escenografía y los efectos visuales también son impresionantes. Aunque a veces los momentos parecen precipitados, el espectáculo es sobrecogedor en una vívida paleta de carmesí, dorados y pasteles.
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Fuente (1)
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