3 momentos oscuros pero que invitan a la reflexión en los episodios 3 y 4 de "Namib"

Los episodios tres y cuatro de “Namib” han sido amables con Shim Jin Woo (Lee Jin Woo): encontró nuevos amigos y vio a sus acosadores probar su propia medicina. Desafortunadamente, no se puede decir lo mismo de Yoo Jin Woo (Ryeoun), Chris (Lee Ki Taek) y, en cierta medida, Yoon Ji Yeong (Kim Ji Woo).

Aquí hay tres momentos oscuros de los episodios tres y cuatro de “Namib” que te harán detenerte y pensar en la pesadilla que viven los aprendices de ídolos todos los días.

¡Advertencia: spoilers de los episodios 3 y 4 a continuación!

Cultura normalizada de dieta restrictiva

Después de observar las expresiones faciales de cada personaje en las escenas que discutiremos pronto, está claro que el creador del programa quería criticar la cultura normalizada de dieta restrictiva y poco saludable en la industria del entretenimiento del K-pop.

El primer caso ocurre cuando Yoo Jin Woo se salta su hora de almuerzo en la escuela para ir y unirse a Kang Soo Hyun (Go Hyun Jung) para una sesión de práctica. Después de que termina su evaluación vocal, Soo Hyun le dice que es libre de irse, a lo que Yoo Jin Woo le pregunta qué debería hacer con su almuerzo ya que usó su hora de almuerzo para la sesión de práctica. Sin inmutarse, Soo Hyun responde que debería salteárselo. No solo Yoo Jin Woo reacciona negativamente a la respuesta de Soo Hyun, sino que la entrenadora vocal también parece incómoda con su elección de palabras.

Otra escena que resalta la gravedad de este problema es cuando Yoo Jin Woo y Ji Yeong están en la casa de Soo Hyun, celebrando el cumpleaños de Shim Joon Seok. La escena es la siguiente: Ji Yeong pide pollo frito porque, en sus palabras, los cumpleaños están incompletos sin él. Shim Joon Seok le pregunta a ella y a Yoo Jin Woo si podrán controlarse ya que sabe que los aprendices están a dieta, a lo que Ji Yeong responde que sí porque “lo hemos estado haciendo durante 10 años”. Cabe señalar que tanto Yoo Jin Woo como Yoon Ji Yeong son estudiantes de secundaria y tienen alrededor de 17/18 años, lo que significa que han estado a dieta desde que tenían básicamente solo ocho años. Afortunadamente, al final, Joon Seok los convence a ambos de comer el pollo, lo que implica que no está de acuerdo con la ideología de dieta restrictiva de Soo Hyun.

En una escena posterior, después de que Yoo Jin Woo y Ji Yeong actúen para una pequeña audiencia en un café como una sesión de práctica, Yoo Jin Woo le menciona su hambre a Soo Hyun. Una vez más, ella le dice que “lo aguante” y vuelve a los negocios.

Lo que hace que esta escena en particular sea más dolorosa de ver es que la noche anterior a toda esta terrible experiencia, Soo Hyun vio a Yoo Jin Woo comiendo en exceso. Aunque la razón detrás de su atracón fue la angustia emocional en lugar del hambre animal pura, sigue siendo un adolescente que lucha con sus hábitos alimenticios, y que Soo Hyun lo aliente a morir de hambre es bastante inhumano.

Chris: ¿villano o víctima?

Una de las cosas en las que casi todos los espectadores estuvieron de acuerdo después de ver los episodios de estreno de “Namib” fue que el amigo adulto de Yoo Jin Woo, Chris, es el malo. Constantemente intenta pintar a Soo Hyun como una CEO egocéntrica y malvada que solo se preocupa por su propio beneficio y hace que Yoo Jin Woo se separe de ella y confíe solo en él. Sin embargo, después de que los episodios recientes desarrollen más el personaje de Chris y muestren su lado de la historia, es difícil saber si es bueno, malo o simplemente otro humano que ha sido agraviado por un Soo Hyun moralmente gris.

Para ponerlo en contexto, los episodios de estreno insinuaron que Chris era un aprendiz de Pandora Entertainment que nunca llegó a debutar, y ahora odia a Soo Hyun por su inexistente carrera de ídolo. El porcentaje de aprendices que debutan en cualquier compañía de entretenimiento nunca es de 100, por lo que los espectadores le dieron a Soo Hyun el beneficio de la duda, suponiendo que Chris no pudiera obtener una puntuación lo suficientemente alta como para ganarse su debut.

Si bien aún no sabemos si Chris tenía las habilidades para ser un ídolo exitoso o no, una de las principales razones por las que su oportunidad de debut se desvaneció hace 10 años no fue su incapacidad para actuar bien, sino porque Soo Hyun se fue a los Estados Unidos sin pensarlo dos veces para que su hijo recibiera tratamiento.

Por un lado, ¿quién puede culpar a una madre por dejar todo atrás para estar allí para su hijo? Por otro lado, arruinó la oportunidad de alguien de encontrar su parte del éxito y la felicidad.

Aunque una mirada a su historia de fondo demuestra que podría haber sido una víctima hace 10 años, puede que sea demasiado pronto para decidir si es un tipo cómicamente malo en la actualidad y sabotea a Yoo Jin Woo por celos o no. Pero si nos fijamos únicamente en los acontecimientos que se desarrollaron en los episodios tres y cuatro, Chris parece un hombre descarriado que no quiere que Yoo Jin Woo confíe en la misma persona que, a sus ojos, arruinó su vida. Chris puede volverse malvado e intentar activamente arruinar las posibilidades de Yoo Jin Woo de ganar “Star Rise”, pero en el presente, parece preocuparse genuinamente por un adolescente al que conoce desde que era un niño asustado y abandonado.

La práctica poco ética de utilizar el trauma para obtener clics y vistas

El año es 2025 y todos, o al menos una gran mayoría de ávidos espectadores de reality shows, saben lo fabricados que son en realidad los reality shows. Los productores a menudo usan el pasado trágico del sujeto o sus problemas de salud mental para obtener más vistas simplemente para aumentar sus ganancias. Y aunque los programas de supervivencia de ídolos no pueden categorizarse completamente como reality shows, no están lejos de serlo.

Desde los episodios de estreno, “Namib” ha estado señalando cómo, para la mayoría de estos programas de supervivencia, el verdadero ganador es seleccionado desde el principio. Y sin importar el talento o el esfuerzo que otros concursantes pongan en la actuación de cada semana, su destino ha sido sellado desde el principio.

Los episodios tres y cuatro se centraron más en un aspecto igualmente poco ético y deshumanizante de estos programas. En una escena, Soo Hyun va a hablar con el productor de “Star Rise” para mostrarle cómo Yoo Jin Woo es un candidato completo para el programa y debería tener más tiempo en pantalla. Según ella, él tiene la apariencia, el talento y una historia de fondo trágica. Y aunque Soo Hyun se niega a invitar a su madre al programa para que la audición de Yoo Jin Woo sea más interesante, el productor parece tener algo más en mente.

En una escena en la que Yoo Jin Woo se está presentando para el programa, el productor le pide al entrevistador que le pregunte por sus padres, lo que hace que Yoo Jin Woo tenga un leve ataque de ansiedad. Más adelante en el mismo episodio, cuando Yoo Jin Woo sube al escenario para actuar ante los jueces por primera vez, ve a su madre sentada entre el público.

Parece fuera de lugar que Soo Hyun la invite y que el productor no pueda localizarla con tan poca antelación, por lo que la madre de Yoo Jin Woo probablemente apareció por su propia cuenta. Pero no hay que olvidar un hecho: si el productor pudiera, definitivamente habría invitado a la madre de Yoo Jin Woo para aumentar los índices de audiencia de su programa a costa de angustiar a un adolescente que ya es mentalmente inestable.

Si bien los episodios recientes fueron bastante oscuros y conmovieron a los espectadores, hay algo bueno que salió de ellos y es el desarrollo del personaje de Soo Hyun. ¡Ella no es una Mary Sue!

Soo Hyun es una madre que ama a su hijo, pero al mismo tiempo se niega a darse cuenta de cómo le está imponiendo sus propios sueños. Es una mentora que, sin duda, quiere que su aprendiz tenga éxito, pero al mismo tiempo no rehúye la forma en que puede beneficiarse del trato. Como ser humano en el mundo real, puede que no se la considere una buena persona, pero como personaje en pantalla, definitivamente es un tema interesante para analizar.

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